Ya había empezado a escribir el folio en blanco con un «no». Me ha pasado algunas veces, pero enseguida me doy cuenta y lo borro. Me costó años saber decirlo con firmeza. Y ahora, decido cuándo «sí» y cuándo «no».  Una profesora muy sabia me dijo un día: «El amor lo justifica todo». Esas palabras ...